domingo, 18 de enero de 2009

Regreso a la política exterior franquista.

Mucho se agradece, hay que reconocerlo, que a uno le recomienden un interesante artículo de Pilar Rahola en La Vanguardia que, seguramente, me hubiera perdido. Como siempre, además de escribir muy bien, se muestra valerosa.

Después de haber visto las manifestaciones de la extrema derecha disfrazada de "progre" de Barcelona y Madrid, si eres una persona conocida es para ponerse a temblar. Es demasiado el tener que sufrir, a diario, continuas amenazas de muerte.

Parece que a este país sólo le quedan normales las Raholas y las Díez. Ni los Zerolitos viven en mundos reales, tal vez precisan unos días o meses de estancia en Irán.

Esta "falsa izquierda" que padecemos parece que echa de menos, ¿se recuerda?, a la "Guardia Mora" de Franco: ¡cuánto decoraba en los desfiles militares! Mientras, no había relaciones diplomáticas con Israel, pero sí con los regímenes musulmanes más medievales.

Entre otras cosas, en las manifestaciones de la extrema derecha a las que asiste y apoya el PSOE, se pide la rotura de las relaciones diplomáticas con Israel. Quieren que volvamos a ser franquistas.

Estos progres de izquierda, que se comportan como de extrema derecha, no recuerdan cómo Marruecos se adueño del Sahara, mientras Franco la palmaba. Olvidaron la invasión marroquí, encabezada por mujeres y niños que actuaban de escudos, lo mismo que hoy observamos en Gaza. Pretenden que Israel se comporte igual que España y que los israelíes, que no sean islámicos, abandonen Oriente Medio. ¡ Qué correcto comportamiento hemos tenido con los saharauis ! Volvamos a ello.

Estas terribles "izquierdas", que son derechas extremistas, mantienen con la dictadura de Cuba una relación similar a la franquista. La Conselleira de Cultura del BNG se llevó a Cuba a 200 invitados pagados por la administración autonómica, para que, ja, ja, ja, asistieran a una Feria del Libro y que, de paso, se tomasen unos cuantos chupitos. Un amigo acompañó hace años a un Conselleiro de Cultura, del PSOE, en su visita a Cuba. Tuve la mala suerte de ver unas grabaciones en las que el Conselleiro se dirigía a Fidel como "mi Comandante". Hay que ser bestias estúpidas para ignorar que tras sufrir la asquerosa dictadura de Fulgencio Batista, Cuba era a pesar de ella y hace 50 años, el tercer país de América Latina en RPC, tras Argentina y Uruguay. Hoy, sólo supera a Haití, una de las naciones más pobres del mundo.

Deben ignorar, entre otras cosas, que Cuba tuvo el primer tramo ferroviario español, de La Habana a Güines, anterior al de Barcelona a Mataró.

Si algo distingue a los "progres" es que son incapaces de entender que entre los republicanos y entre los franquistas había porcentajes similares de asesinos y de ciudadanos modélicos.

El comentario que voy a hacer puede resultar inoportuno, teniendo en cuenta el parentesco. Recuerdo a Eugenio, tan franquista y católico tradicional que, para alguien como yo, entre otras cosas sin bautizar, la boda le resultaba "complicada" y su matrimonio incluía un suegro... Resulta que, posteriormente, no observé mayores problemas. Te enteras que pasó por una época política con la alcaldía capitalina, que fue Procurador en Cortes, Delegado de Sindicatos, General mutilado, abogado con despacho privado y demás, que hacen inexplicable que se haya visto obligado, en pleno franquismo, a la venta del pazo familiar. Toda la vida en un económico piso alquilado: ¡eso es imposible!, y sin embargo, ocurrió.

¿Que militante y gobernante de las "izquierdas" actuales sufriría algo similar? Ninguno. Salvo que en su afán por destacar, en lugar de vender se hubiese puesto a especular alocadamente, como un corrupto normal y corriente, superando sus recursos.

Te enteras de algo increíble: un pariente materno ( en su casa, pasaba de pequeño una semana todos los años ) que durante la República fue dirigente de la UGT del ferrocarril en Badalona, resultó apresado al finalizar la guerra. Sólo se divertía, en tiempos franquistas, escuchando en la radio emisoras prohibidas.

Lo curioso me surgió cuando, ya casado, me hizo una "casi confesión": resulta que D. Eugenio, actuando en la post-guerra de Juez en Barcelona, se comportó de modo ejemplar con él. Evitó que su estancia carcelaria se prolongase y consiguió que pudiese reintegrase al ferrocarril en Lugo. Para mi encantador tío Pepe, Eugenio era un ejemplar inexplicable por ser franquista. No era capaz de entender su comportamiento porque, desde su óptica, sólo existían en España dos alternativas humanas:

1ª- Republicano: honrado defensor de las clases populares.

2ª- Franquista: burgués con tendencias asesinas que quiere humillar a las clases trabajadoras.

Claro, hoy observas cosas increíbles. Resulta que recuerdas tiempos en los que eras socialista clandestino y, sin apenas un duro, ahorrabas en tiempos de "Franco paciente" para poder mandar 1000 pesetas a los metalúrgicos vascos en huelga, militantes de la UGT. Hoy te alegras viendo que hay muchos, en todas partes, disfrutando de más de 60.000 euros al año. Desarrollan la excelente actividad de controlar la libertad de opinión en los innumerables medios de difusión públicos, siempre que no se oponga a los intereses de sus partidos.

Yo duré muy poco en el PSOE, ya legalizado. Las escenas que contemplaba me escandalizaban más, incluso, que algunas que sufrí durante la dictadura. Recuerdo reuniones clandestinas, como ugetista, con miembros de sindicatos franceses. Eran muy duras, insufribles, en mesas de restaurantes con abundante marisco.

Nuestros recursos económicos, de origen externo, se empleaban en mostrar nuestra magnifica gastronomía.

Si me pongo a recordar el día que me largué de la FSG del PSOE, cuando actuaba de portador de los votos lucenses en el primer congreso (todavía existía el PSP), no puedo borrar las tristes imágenes observadas. Cuando llegué al auditorio santiagués de La Caja o Caixa , un tipo desconocido entonces y, posteriormente, corrupto Alcalde de Vigo, me abrió la puerta de copiloto donde me hallaba, para proponerme un acuerdo político de mando en Galicia, nada ideológico.

Viendo actuar después a Guerra no pude evitar el preguntarme, ¡qué pronto!, que demonios hacía un tipo como yo entre esa clase de gente. Adiós, y que ustedes disfruten.

Aún así, viendo todo lo que vi, de ningún modo llegué a imaginar una capacidad de corrupción como la que hemos sufrido. Nunca fui suficientemente listo.

viernes, 9 de enero de 2009

Zapatero, nunca Hamás.

Tenemos un presidente tan tremendamente estúpido que resulta terrorífico. Pasan los años y no aprende nada. Intentó, ilegalmente, negociar con ETA y consiguió unos resultados maravillosos, muy suyos.

Pobre chico, quería pasar a la historia no por su maravilloso papel en la debacle económica que envía millones de españoles al paro, sino por su extraordinaria capacidad pacificadora.

Creía, y sigue creyendo, que unos terroristas carentes de profesión distinta del asesinato, de algún modo remunerado, resultarían fácilmente colocables en una actividad alejada del cargo político con salario y mando en Euskadi.

Ahora, que ya no puede charlar con ETA, pretende aproximarse al diálogo con Hamás. No es consciente de que estos islamistas son todavía más salvajes que los etarras. Nuestros etarras, siempre bien tratados salvo por el Gal, han matado y mutilado niños y ancianos sin el menor dolor y jamás pidieron perdón por asesinar a dos inmigrantes ecuatorianos en el atentado de la T4. Son así, enfermos mentales.

Bueno, parece que estos etarras no son suficientemente malvados para el buenista Zapatero. Yo, piensa él, preciso relación con aquellos que no sólo matan ancianos y niños de los enemigos sino con los que, sin problemas, lanzan misiles desde zonas habitadas por niños y ancianos que pagarán sus actuaciones terroristas. Los de Hamás son así de listos, no disparan desde descampados. Con la cantidad de hijos que tienen, ¿qué hacen estos cobardes terroristas? Algo muy sencillo: usar a los niños como escudos.

Parece que la Alianza de Incivilizaciones zapateril no tiene marcha atrás. Terminaremos imitando al progre Irán apoyando a los palestinos de Gaza dominados por Hamás que, recordemos, derrotó en guerra civil a Al Fatha.

¿Siguen atacando con misiles a Israel? Eso no tiene importacia. Señores de Israel, ya sean ustedes judíos, musulmanes o cristianos: ¡aguanten, sin respuesta, el vivir rodeados de terroristas que les lanzan misiles!

Mientras esto ocurre, España, con más de tres millones de parados de los que un millón carece de ingresos, se convierte en el segundo país del mundo que más dinero aporta a la ONU para el mantenimiento de la situación demencial creada por Hamás en Gaza.

¿No es Hamás una organización reconocida como terrorista internacionalmente? Déjenme a mí el charlar con ellos. ¡Se me da tan bien sonreir!

lunes, 5 de enero de 2009

Prodigiosa década.

Una década aparentemente maravillosa para la economía española, salvo estos últimos meses, se cumplió el pasado día uno. Hace ya diez años que España logró entrar en el euro y que supimos que necesitaríamos 166,386 pesetitas para hacernos con una nueva moneda europea. La general e inconsciente asociación del euro a los veinte duros se demoró unos años, ya que el manejo de los nuevos billetes y monedas no pudimos ejercitarlo hasta el 2002.

Afortunadamente, esa asociación inflacionista sólo ha durado 7 años pero de todos modos, dada nuestra vieja afición al encarecimiento desmedido de los precios, hemos llegado a una situación de casi igual coste de bienes esenciales en España y en países ricos europeos, económicamente muy distantes de nosotros hasta hace pocos años.

Pensemos en las viviendas y en su desmesurada construcción en nuestro país que condujo a la existencia actual de casi un millon y medio de residencias vacías. Mientras se realizaba esta construcción, desmedida, se producía algo económicamente inexplicable: encarecimiento especulativo de los bienes inmuebles, muy por encima de nuestra elevada tasa de inflación.

¿Se puede explicar el mantenimiento de una situación tan irregular de modo tan prolongado? Si todavía estuviésemos con la peseta, no cabe la menor duda de que la crisis constructora habría aparecido hace años, el número de hipotecados con dificultades de pago sería mucho menor y, como en el 82, los pisos recien terminados presentarían precios de venta claramente inferiores a los ofrecidos ante los planos.

Los bancos y las financieras habrían procedido a actuar mucho antes, dificultando la concesión de créditos a los compradores con posibilidades de morosidad. Nuestra permanencia en el euro nos ha permitido disfrutar de situaciones no prorrogables, pero casi paradisíacas.

Si nos fijamos en los bajos tipos de interés de los créditos asociados al euríbor vemos que, muy a menudo, se hallaban por debajo de nuestras elevadas tasas de inflación, mayores que las de la eurozona.

Nuestra pertenencia al euro nos ha permitido ir incrementando nuestro déficit exterior hasta alcanzar la cifra récord del 11% anual sin tener que recurrir a la devaluación, y acumular una deuda externa de 1,68 billones de euros al concluir el 2008.

Pensemos en algo sencillo, pero increíble: durante los cuatro y pico años de "gobierno" de Zapatero la elevada deuda externa de España recibida en el 2004, ni se redujo ni tan siquiera se mantuvo. Su magnitud no se duplicó, ¡ se multiplicó por 2,3 !

Ante el elevado riesgo de comportamiento moroso de los inversores españoles, ¿de dónde vendrán los enormes capitales que precisa el mantenimiento de nuestra artificial economía, y qué mecanismos usará la banca española para acceder al crédito internacional? Las dificultades de obtención de créditos en el exterior que sufrirán las empresas españolas todavía se incrementarán, cuando ahora ya son enormes.

El bono español, muy buen indicador de las dificultades futuras de consecución de créditos empresariales en este país, se ha situado más de 100 puntos básicos por encima del alemán, ya que es más seguro invertir en Alemania que en España. Si conseguir crédito externo va a resultar casi imposible, no nos queda otra política económica a la que recurrir que la tristemente realista: fomento del ahorro y disminución del gasto popular, ya que la reducción del gasto público no está prevista, a pesar de la cara posición en la que el bono sitúa el pago de la deuda pública española. El descenso del gasto, ¿incrementará el paro? Sin la menor duda, pero si queremos seguir manteniéndonos en el euro, es el futuro menos malo previsible.

sábado, 3 de enero de 2009

Natalidad decontrolada.

Parece que los humanos tendemos a alejarnos de nuestro natural comportamiento zoológico en, por ejemplo, el mantenimiento adecuado de nuestras poblaciones. Hace unos años, si algunas cosas preocupaban a los ecólogos, sanitarios, políticos o sociólogos, estudiosos de los insostenibles crecimientos de las poblaciones humanas, entre ellas se hallaban el futuro de la adecuada alimentación, las mejoras formativas y culturales, la reducción de la natalidad descomunal e incontrolada en ciertas zonas y la casi ausencia de preocupación y responsabilidad masculina en el adecuado trato de la descendencia.

Ahora se dispone de ONGs dispuestas, aparentemente, a considerar que hay grupos humanos incapaces de mejorar el futuro de sus descendientes. Por ser seres inferiores, pero comprensibles, no logran disminuir sus tragedias cada día más irresolubles. Lo único que les preocupa es disminuir la mortalidad y, aparentemente, para nada controlar la natalidad desmesurada. También se preocupan por facilitar la recepción de la población, insostenible en ciertas zonas, en otros lugares del mundo.

¿Cuántos habitantes, al margen de la enorme mortalidad que habría padecido por la falta de alimentos y la escasa sanidad, tendría actualmente China de no haber adoptado una política restrictiva en cuestiones reproductoras?

En España, que sufriría reducción de población de no ser por la inmigración masiva de estos últimos años, las ONGs se preocupan de la defensa casi incondicional del aborto, de facilitar el uso de los preservativos no sólo con fines protectores, del fácil acceso a la pastilla del día siguiente al coito y de que hombres y mujeres puedan adquirir la infertilidad quirúrgica con facilidad.

Mientras tanto, otras ONGs en países incapaces de alimentar a sus poblaciones de crecimientos descontrolados, se preocupan únicamente de la solidaridad internacional y de la donación continua de alimentos, como si se tratase de ayudar ante una catástrofe imprevista. No son conscientes de que las ayudas permanentes conducen a los pueblos a la irresponsabilidad colectiva. Parece que ciertas zonas están sometidas a huracanes, inundaciones, terremotos o sequías continuas, que precisan un trato solidario indefinido, y que los auxilios internacionales tendrán que ser permanentes, aunque el comportamiento de su población, sobre todo masculina, sea inhumano.

Es inexplicable, por ejemplo, el descomunal crecimiento de la población en Gaza si no se tienen en cuenta las ayudas internacionales. No parece posible un comportamiento pacífico con Israel cuando, por ejemplo, líderes polígamos de Hamás , con numerosísimos hijos que apenas conocen y que pueden emplear como escudos protectores, se permiten el lujo de vivir a cuenta de las ayudas y apoyos de otros países.

Sin duda, todo parece indicar que se mantendrán indefinidamente estas solidaridades internacionales conducentes al crecimiento de una población de modo insostenible a corto plazo. ¿Qué futuro no terrorista le queda a la gran cantidad de jóvenes palestinos, incapaces de ejercer una actividad productiva? Lo mismo que ocurre en Gaza se está produciendo, con la intervención de diversas ONGs, en muchos países. Parece que el crecimiento de la población humana, a diferencia de lo que ocurre con el resto de las especies, no tiene límites.